Ha abierto un nuevo hotel y hoy me he dado cuenta de que estoy en crisis: 200 eurazos una noche (sólo la noche, qué será de la tarde...) en la más básica de las opciones. Creo que tendré que considerar otras posibilidades, por ejemplo:
- Llevarla a pasear por el parque de las palomas y comprar un paquetillo de arvejones (5 euros)...
- Tomar una cervecita en la Alfalfa (10 euros más taxi)...
- Ir de románticas compras a Mercadona (80 euros de tarifa plana)...
- Quedarme en casa (2 euros de la litrona en la tienda de mi amigo chino llamado Paco)...
En fin, el dilema está servido.
Hay cosas que no tienen precio, para lo demás...
7 comentarios:
No entiendo lo de la "dormida a pierna suelta". No te aconsejo ni los arvejones (la rima, ya sabes) ni el Mercadona (porque no me fío del romanticismo del Mercadona, vaya). Yo que tú dejaba gastos menores por un mes y me daba el homenaje. Si no, ¿para qué vive uno?
Julio, nosotros siempre hemos sido unos señores. ¡Echa la casa por la ventana y no te preocupes de nada más! ¡Olvida ya los fondos de pensiones!
También podías darle un interminable paseo turístico en el Ibertren, llamado Metrocentro o tranvía por algunos guasones. Es baratito.
200 euros no es mala cosa. A mí me suele costar más...
Sin duda: me decanto también por el homenaje. Estoy con el profe.
Un saludo en mi primera visita a tu blog.
Saludos, Juanma:
Bienvenido al rincón.
Gracias por tu visita. Ese aliño me parece sencillamente insuperable.
Un saludo.
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