martes, 25 de noviembre de 2008

El intermedio

Esta noche he puesto la tele y zapeando he accedido al programa El intermedio de la Sexta.
Horror y pavor. El GranW (nombre innombrable para mí, que no hablo idiomas) estaba absolutamente volcado en la burla más cruel en torno al Cristianismo y sus símbolos fundamentales (por ejemplo, en relación con la guerra de los crucifijos aseguraba que lo que más le preocupa es lo cansado que ha de estar Cristo después de tantos años prendido del madero).
Me parece inaceptable que una cadena de línea supuestamente liberal muestre tan poco respeto por la intimidad ajena, así que apago la tele y, al carajo: me pongo a escribir...

Los días

Los días son
escarabajos de papel
(asustan pero no hacen daño).
Pero, ¿y los años?...

viernes, 21 de noviembre de 2008

Otra lentejita

Las noches vuelan,
llega el invierno,
las horas matan.

martes, 18 de noviembre de 2008

Hace una semana


Hace una semana que no me asomo a la ventana del portátil para contarle al mundo, o quizás a mí mismo las cosas que me gustaría contar o que me gustaría callar, las que ofrezco a los demás y las que me guardo, porque, como dijo el poeta, tengo en mi alma un almario lleno de ropa vieja, o quizás de ilusiones renovadas. Y un día, como el que no quiere la cosa, ocurre algo insustancial, nimio e irrelevante que me hace rebuscar en los viejos bolsillos de la conciencia esa llave oxidada que todos llevamos oculta aunque no lo sepamos.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Alojarse en tiempos de crisis

Han abierto en Sevilla un nuevo hotel cuya página web (www.emehotel.com) he visitado, por si aquello de llevar a mi señora a un spa, una cenita romántica y una dormida a pierna suelta.
Ha abierto un nuevo hotel y hoy me he dado cuenta de que estoy en crisis: 200 eurazos una noche (sólo la noche, qué será de la tarde...) en la más básica de las opciones. Creo que tendré que considerar otras posibilidades, por ejemplo:
- Llevarla a pasear por el parque de las palomas y comprar un paquetillo de arvejones (5 euros)...
- Tomar una cervecita en la Alfalfa (10 euros más taxi)...
- Ir de románticas compras a Mercadona (80 euros de tarifa plana)...
- Quedarme en casa (2 euros de la litrona en la tienda de mi amigo chino llamado Paco)...
En fin, el dilema está servido.
Hay cosas que no tienen precio, para lo demás...

domingo, 2 de noviembre de 2008

Doña Sofía

Yo, que no me suelo meter en política pero sí en cuestiones humanas o sociales, me siento en estos últimos días preocupado por Sofía, una mujer que aunque griega, reina de españoles, madre de españoles, abuela de españoles.
Ella habría comentado a la escitora Urbano su desaprobación hacia las celebraciones del día del orgullo gay y también habría reflexionado sobre la naturaleza del vocablo matrimonio aplicado a la unión de personas del mismo sexo.
Coño, que opinó de una manera contraria a lo políticamente correcto y un líder mediático dijo que estaba insultando a una porción significativa de españoles (1), que la reina no puede opinar, hombre...
Jose Luis Rodríguez sí opina sobre temas de actualidad que pueden ser polémicos y nadie le dice nada (cállate en razón de tu cargo, o algo así) porque está en la onda.
Si Sofía, la mujer, no puede opinar, apaga y vámonos; le diseñamos un precioso burka para la corona, y, al carajo. Aquí nadie puede hablar ¿Hasta qué punto hemos llegado?
(1) Me pregunto si cuando esta gente se viste en las manifestaciones de júbilo cromosómico de monja con el pecho fuera o cura morreándose con arcipreste no se ofende a una amplísima mayoría de los españoles: el 80% nos declaramos católicos y aseguro que somos tolerantes (aunque no de salón, claro).