Se acaba una historia
y comienza otra
y ruedan por el corazón
las lágimas de la despedida.
Los besos que se dieron,
el cariño que se invirtió
se vuelven viento
y
escapan,
sin saberlo,
por los recuerdos
y otras rendijas del alma.
El profundo sosiego de las cosas
-
En días de tribulación cuánto consuela la lectura de Séneca, el filósofo de
la serenidad, el autor, precisamente, de las "Consolaciones".
El primer auto...
Hace 21 horas
15 comentarios:
Hay que agarrar y dejar que esas rendijas se hagan más y más estrechas. Y no quepa nada en ellas.
Nada puede escaparse de nosotros.
Un abrazo Julio.
Muy bella nostalgia.
Y se repite lo mismo año tras año, y las historias nuevas van tapando a las antiguas.
Muy bueno, un abrazo
Gracias, Capitán: el eterno retorno...
Gracias, Javier. A lo mejor es bueno que se escapen.
Pues pienso que sí. Tienes razón amigo.
Que se las lleve el...
Que se las lleve, sí.
Como cantaban y cantan los viejos rockeros, ¿no será la misma vieja historia de siempre?
Muy bello Julio y un poco caligramero. Veo el perfil de alguien que da la espalda.
La misma, Lucena; la misma...
Gracias, Ale: de espaldas, ni pa irse...
Julio, te han llamado "viejo rockero".
Yo lo de "rockero" no lo veo tan claro...
Un abrazo.
Pedazo cabrón...
- Las rendijas del alma...el alma tendría que venir sin ellas. Que mágico sería poseer un alma iluminada desde adentro donde quepan sólo los grandes amores. Un abrazo. Ade
Bienvenida a mi rincón, Ade
Holaaa Julio,sin duda tu espacio ya es familiar para mi,expresiones,reflexiones de un sevillano que me encanta como escribe.
Difícil que no se nos escapen cosas por esas rendijas...
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