miércoles, 24 de junio de 2009

A mediados de los ochenta, y por mediación de Octavio, un grupo de amigos estudiantes universitarios nos íbamos los veranos a trabajar de camareros a Málaga para sufragar nuestros caprichos del resto del año.
Una de tantas veces, nos acompañó Andrés, un compañero de facultad algo apretaete. Aquel año, estuvimos currando en un bar de La Carihuela, propiedad de uno de los muchos ingleses que en la época habían decidido trasladarse a la Costa del Sol.
Andrés, siempre sentimental y enamoradizo, se había quedado prendado de Chelo, una chica algecireña que trabajaba en un pub after hours que frecuentábamos. Encoñado perdido, decidió pedirle permiso al señor Smith para almorzar con su amada: la idea era irse a las cuatro de la tarde, hora en la que nuestro gerente nos obsequiaba con un frugal almuerzo construido sobre las piezas de pescaíto sobrantes.
Al quinto día, Andrés fue fulminantemente despedido.
- Pero, ¿qué le has dicho al guiri, alma de cántaro?
- I´m not coming today(`hoy no como´). No entiendo por qué me ha echado...

23 comentarios:

Juanma dijo...

Ay, ese inglés traicionero, esos pecados maravillosos de juventud. Pero, bueno, ¿se ligó a la Chelo o no?
Y Octavio, siempre metido en fregaos...

Un abrazo, querido Julio.

Sombras Chinescas dijo...

Seguro que Octavio aprovechó la coyuntura para ligarse a la Chelo.

Saludos.

Alejandro dijo...

No comment.
He´s a f...ing asshole.

Capitán dijo...

Esos ingleses que no entienden el inglés, nunca cambian, y tu pobre amigo se topó con uno

Un abrazo

Leticia dijo...

Los españoles en general, y los andaluces en particular, somos un tanto "reacios" a aprender idiomas...:-)

em10 dijo...

Muy divertido, supongo que no tanto para el afectado :D

Octavio dijo...

Jo, ya casi no me acordaba... Aquellos días en La Carihuela. De Chelo, fíjate, sí me acordaba, y de su compañera Patricia, que acabó abriendo su negocio propio en Benalmádena unos cuentos años más tarde.
Gratos recuerdos, Julio. Un abrazo.

José Miguel Ridao dijo...

Muy buena anécdota. De todos modos, el que tenía que hablar español era el hijo de albión, que para eso estaba en Málaga. Un hostelero español establecido en Londres tiene que hablar en inglés con sus camareros por güibols, por muchos turistas españoles que reciba. Abrazos.

Julio dijo...

A la amiga, Jesús. Octavio es un mamón, pero no con los amigos.

Julio dijo...

Sí que se la ligó, Juanma; y Octavio, a su amiga...

Julio dijo...

Sí que es verdad, Leticia

Julio dijo...

Cosas de la pérfida Albión, Capitán

Julio dijo...

Ale, el guiri un cabrón y Andrés un bruto...

Julio dijo...

Bueno, los demás y Chelo le dimos de "comer"

Julio dijo...

Razón que llevas, Ridao

Julio dijo...

Sí, Patricia siempre tuvo mucha apertura...espiritual.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Me huele a Octavio, y tanto...

Tanto, tanto, tanto, que te felicito por tan encoñada entrada Julio.

Pobre camarero...

América dijo...

Yo,lo que soy yo de quien quiero saber es de Chelo que paso???...Julio!....Tengo algo de licencia estoy de cumpleaños

Miradme al menos dijo...

¿Allí fue donde nació aquello de "Do you want with me a revolcón behind the matorral"?
Un abrazo, Julillo.

Julio dijo...

Gracias, Javier. Sí que huele, sí...

Julio dijo...

O donde fuera, Miradme

Julio dijo...

Felicidades América: pregúntale a Octavio, que él se acordará.

Julio dijo...

Nos reímos tela, Enrique