Donde viva tu soledad, esa soledad que de todos se apodera, pero que pocos disfrutan, en ese lugar de tu corazón, estaré siempre.
Y Caperucita se alejó del bosque llorando...
Hace 1 día
martes, 21 de abril de 2009
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12 comentarios:
Bien Julio, entendamos que la soledad nunca está sola, por más que quiera, nunca, porque el corazón siempre está acompañando.
La soledad como tal no existe, ese sentimiento exiliado y desgarrado, que muchos denominan soledad (recuerdo ahora un libro del doctor Rodríguez Sacristán), es una escusa de la vida en sociedad.
Caperucita se encontró al lobo, y a su abuela, y la sociedad tuvo que salvarla de su "soledad".
Un fuerte abrazo Julio.
Gracias, Javier. La soledad es algo que se supone al ser humano, como el valor en la mili...
Hay veces que añoro a la soledad.
A Caperucita también.
La soledad, Alejandro, si se elige es maravillosa. En cuanto a lo de Caperucita, en fin...
Si Caperucita se quedó sola, imagínate el lobo...
Ahora más en serio, me ha gustado, Julete, ete, ete.
El lobo seguró que se quedó más solo que Caperucita: el cabrón era más feo...
Gracias, Juan
En la mili, querido Julio, fuí inútil total.
No me arrepiento.
Yo me encargaba de la biblioteca (Y no es coña)
Yo también estoy del lado del lobo. Esa si que es la auténtica soledad.
Magnífico, Julio.
Gracias, Miradme.
Un abrazo, y una cervecita...
En la soledad , contemplo el silencio .
Tengamos compasión del lobo ...
Rosna
Bonito lo de contemplar el silencio, Rosna. La compasión se ha perdido en occidente...
Saludos cordiales
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